miércoles, 11 de febrero de 2009

Condenan a 53 meses de prisión a socios de Murcia


A 53 meses de prisión y al pago de una multa de 375 salarios mínimos legales mensuales vigentes, fueron condenados por el Juzgado Cuarto Penal del Circuito Especializado de Descongestión, Daniel Ángel Rueda y Margarita Pabón Castro, socios de la intervenida firma DMG Grupo Holding SA.

La sentencia fue proferida por el juez tras aceptar los preacuerdos suscritos entre los imputados y la Fiscalía, que fue notificado el 9 de enero último ante el Juzgado Cuarto del Circuito Especializado de Bogotá.

Después de aprobar los preacuerdos y de condenar a los procesados por el delito de lavado de activos en calidad de coautores, el juez aseguró que, tanto Pabón como Rueda, deberán pagar su condena en una cárcel.

Por su parte, Daniel Ángel aceptó ser la persona que relacionaba a personalidades del país con David Murcia Guzmán y su conglomerado empresarial.

De acuerdo con lo establecido por el juez, "en la investigación -según la Fiscalía- se pudo establecer la negociación de ventas y yates en Cartagena enviando dineros por intermedio de William Suárez, así como la coordinación de apertura y funcionamiento de las instalaciones de DMG en el norte de la capital de la República”.

Durante la audiencia la Fiscalía, los imputados y la defensa no interpusieron recursos.

Con esta medida, Ángel y Pabón tampoco podrán recibir beneficio alguno, como el de la casa por cárcel, como lo habían solicitado durante el proceso.

Según el Juez, lo que hicieron Ángel y Pabón a través de casi tres años para ocultar el rastro de la plata de DMG y darle apariencia de legalidad, representó una “amenaza para el sistema económico y la estabilidad del país”.

Ángel aceptó haber sido testaferro y relacionista público de David Murcia Guzmán, el creador de DMH y que manejó negocios como la venta de siete yates y la instalación de toda la infraestructura para que la empresa funcionara en Bogotá.

Ángel declaró como plata de origen ilícito los 400 millones que recibió de DMG en el año 2007 y los 500 millones de pesos que fueron encontrados en su apartamento el día de su captura.

Pabón, a su vez, reconoció que coordinó una estrategia legal y financiera que pretendió blindar la firma a pesar de que esta se nutría de plata que captaba de manera abiertamente ilegal.

El aceptar los cargos les permitió a Pabón y a Ángel no entrar en detalles de sus actividades.


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